jueves, 16 de diciembre de 2010

REFRESCANDO Y REAFIRMANDO NUESTRA VISIÓN

Amigos todos:


Este video de 38 min. expone nuestra visión como iglesia. Fue mi exposición en el Congreso de Misiones Urbanas en la V Región.

Cada uno de los miembros del equipo plantador DEBE darse el tiempo de verlo y considerarlo. Debemos estar alineados en esta visión. ¿Qué nos motiva? ¿Por qué hacemos lo que hacemos en UNO ? 


Este video nos ayudará a refrescar nuestra visión y a afirmarla en nuestro corazón:



Hagan clic aquí:

lunes, 25 de octubre de 2010

PASTOR, ¿QUÉ ES "CAER CON ESTILO"?

Los pastores tenemos algunas frases crípticas para referirnos a cosas que nos hacen mucho sentido a nosotros, pero que a otros pueden parecer un tanto herméticas. Son frases o palabras que nos dan status y nos hacen sentir importantes.

Tal es el caso de "kenosis", "unión hipostática", "supralapsarianismo", "monergismo", etc.


Por estos días, tratando de sobre-compensar mi complejo de inferioridad, me inventé un nuevo término teológico: "no volamos... ¡caemos con estilo!". Es cierto: la frase no es mía, pero me quiero adjudicar el copyright (o copyleft, si prefieren) del uso de la frase y guiarlos a través de una parábola.


Les refresco la memoria:


En Toy Story, Buzz Lightyear era este tipo medio fanfarrón y pasa'o de rollos. Él realmente se juraba que venía del espacio, tenía un láser en su brazo y ese tipo de cosas. Para demostrar que sabe volar, al inicio de la película Buzz cierra los ojos y se lanza hacia el vacío, cae sobre otros juguetes y, sin quererlo, termina medio que volando y cayendo parado de puro chiripazo. Ante esto, el celoso Woody le dice: "eso no es volar... ¡sólo caíste con estilo!"


Ya hacia el final de la peli, Buzz se dio cuenta que no es sino otro juguete más, como sus amigos, y cuando, por fin va planeando de verdad desde las alturas, su (ahora) amigo Woody le dice "Buzz, ¡estás volando!", a lo que Buzz responde: "No Woody, ¡sólo estoy cayendo con estilo!".


Todo plantador de iglesias tiende a tener un poco de Buzz Lightyear... hay que creerse un poco el cuento de que uno viene como de otro planeta. Hay que hacer un test que prueba tus capacidades sobrehumanas y pasar por un entrenamiento que es como láser en los brazos. Pero, de a poco, a medida que vas dejando la teoría y vas entrando a la realidad, te vas sintiendo más y más vulnerable, como un juguete recién sacado de una caja... ¡qué decepción puede ser ese momento cuando entras a la tienda de juguetes y te das cuenta de que hay un pasillo lleno de otros miles como tú metidos en una caja! Y que, probablemente, ya hay nuevos modelos con más accesorios, más brillantes y todo eso. Ser plantador no es ser tan especial después de todo... tu láser no es más que una lucecita led roja, tus controles son un autoadhesivo pegado, tu casco no te protege del peligroso aire del campo misionero y, en fin... tarde o temprano te das cuenta que no puedes volar.


Pero justo en ese momento donde también Dios nos muestra los verdaderos tesoros: amigos, colaboradores, gente que se la juega con uno y por uno. Un equipo de gente capaz de ensuciarse las manos y hacer lo que nunca había pensado que estarían dispuestos a hacer con tal de sacar adelante el proyecto.  Amigos que oran por uno, que, a pesar de la distancia, están al tanto de los avances, golpes y retrocesos y están siempre dispuestos a dar un consejo, elevar una plegaria, prestar o regalar un libro o un material de discipulado. Pero por detrás de todo esto está lo más importante: el soplo del Espíritu de Dios, el viento que nos lleva hacia donde Él quiere, no hacia dónde los libros, los manuales y las conferencias prometen, sino hacia donde Él, soberanamente, quiere. Y cuando por fin aterrices donde el viento de Dios te quiere llevar, te puedes ganar los aplausos o los reproches de la gente... pero eso poco importa para quien ya ganó todo el favor y el reconocimiento que podía desear: en la gracia y el amor escandalosamente incondicional de Dios en Cristo.


Para algunos iglesia UNO ya es una herejía viviente: con un plantador a tiempo parcial que no pasó ni por el assesment ni por un entrenamiento de plantación; no tiene más mentores que sus amigos que también están plantando, los libros y las conferencias por internet; llevan adelante un proyecto que no levantó recursos a través de alianzas estratégicas en el extranjero; UNO no arrienda el teatro más cool de la ciudad sino el templo más gris, etc. etc. Pero no lo hacemos a propósito... nuestro plantador lo que más quiere es hacer un assesment lo antes posible, sólo que no ha tenido la oportunidad ¡porque en Chile no lo hace nadie! No tenemos dudas de las incomparables ventajas de contar con un plantador a tiempo completo, sólo que pensamos que uno a tiempo parcial es mejor que ninguno... no queremos provocar a nadie ni creernos mejores que nadie. Simplemente, junto con el equipo plantador, hemos decidido que es tiempo de cerrar los ojos y lanzarnos. "La mies es mucha, mas los obreros pocos"... ¿les suena esa frase? 


Nuestras técnicas y estrategias son pobres... ¡el data, el telón y la guitarra son prestados! El único aporte externo que recibimos es una pequeña cantidad mensual de un Presbiterio que nietzscheanamente decidió jugársela por nosotros y ¡pucha que estamos agradecidos!... aunque más de la mitad de los que aprobaron en la asamblea no tenían idea de qué estaban aprobando.

Nos da un tantito de rabia y hacemos bromas sarcásticas acerca de quienes hablan, como disco rayado, de "hacer las cosas con excelencia para el Señor" probablemente más por envidia (porque no tenemos los recursos para alcanzar esa "excelencia") que por una razón de peso teológica. Esta es la verdad: no somos un gran equipo, somos pecadores, no tenemos grandes recursos, no manejamos todos los manuales y sólo tenemos como mapa la orden de Cristo: "hagan discípulos de todos los grupos y sub-grupos de personas" y, de vez en cuando nos detenemos a mirar el libro de los Hechos para luego, rápidamente, ponernos en marcha. 


Es verdad: no volamos... no tenemos láser en los brazos... el casco no nos protege de nada y hay miles de otros iguales y mejores que nosotros... pero, por la gracia de Dios y la guía del Espíritu, nuestro anhelo es: ¡CAER CON ESTILO!

miércoles, 25 de agosto de 2010

PENSANDO LA IGLESIA


La realidad de la Iglesia Presbiteriana estas últimas décadas es de iglesias que, en el mejor de los casos, se estancan y, en el peor, decrecen: de iglesias organizadas pasan a ser avanzadas y de avanzadas pasan a ser templos vacíos arrendados a otras denominaciones. Quisiera decir que nuestras iglesias vegetan, pero los vegetales crecen y se desarrollan...

No juzgo. No apunto con el dedo a nadie, excepto a mí. Me siento responsable porque SOY responsable. Y si algo aprendí de Sartre fue que el sentirse responsable no es hundirse miserablemente en el lodo tibio de la culpa sino saber y entender que puedo (y debo) hacer algo para que esta situación cambie. No asumo expectativas mesiánicas de ningún tipo tampoco. Eso es propio de mentes carnales e infantiles, no centradas en Jesús, el único y verdadero Cristo, el único cabeza de la iglesia.

Pensando y pensando algunas ideas me surgieron y quiero compartirlas junto con este video que les adjunto (que ya lo vimos en nuestras reuniones de equipo). No son tesis. No son propuestas. No son proyectos. Son ideas sueltas. Incompletas. Fragmentadas. Que espero nos puedan servir para ser la iglesia que Dios quiere que seamos:

Pensamiento 1:
Paso al frente de una gran iglesia, ubicada estratégicamente a 1 cuadra del centro neurálgico de Santiago. ¿Qué veo? Una gran burbuja de concreto. No me malentiendan. Sus actividades son atractivas y toda la semana está abierta para algún tipo de programación moderna y creativa. Su membresía y asistencia a los cultos dominicales crece. Muchos amigos míos, que nos criamos juntos en la presbi, van a esa iglesia ahora. ¡Y ese es el problema! Mucho trasvasije de otras iglesias. Nadie lo hace intencional. Estoy seguro que el pastor de esa iglesia no lo quiere así, pero la metodología, el lenguaje, el estilo, la forma de ser de las personas (o sea, todo aquello que importa 1000 veces más que las declaraciones de Visión y Misión de una planificación estratégica bien hecha en word y excel) repele a los habitantes de los departamentos que están al lado, al frente y en la cuadra de atrás y sólo logra atraer a los evangélicos o a las personas de clase media que comparten los valores de familia, trabajo y decencia que los evangélicos tenemos. Los cafés y bares del sector, que no son pocos, están llenos de gente que no pisarían ese templo ni aunque les ofrezcan el último musical bien ensayado, con luces, actores y música en vivo del Mesías Bicentenario.

¿Qué es lo más inquietante para mí? Que nuestras iglesias presbiterianas miran pa' rriba este tipo de iglesias y admiran su forma de ser. Sin duda, hacen más que lo que hemos hecho, pero ¿es realmente eso lo que queremos ser? Más importante aún: ¿es eso lo que Jesús nos llamó a ser? Leo mi Biblia y no veo iglesias-burbujas con imponentes templos ni actividades diseñadas para atraer... sino que veo iglesias diseñadas para enviar: iglesias más parecidas a virus (uno bueno, eso sí) que se extienden en todos los tejidos sociales, cambiando familias, plazas, ciudades y hasta la actividad económica de las mismas (como en el caso de Éfeso). Y a propósito de virus, aquí comparto mi segundo pensamiento:

Pensamiento 2:
Si una iglesia es un hospital espiritual (idea que comparto, hasta cierto punto), entonces también es un lugar propicio para la proliferación de infecciones intrahospitalarias, sobre todo si no hacemos uso del único antiséptico efectivo: el Evangelio. Me explico: muchos huyen hacia esta burbuja llamada iglesia. Huyen de la fornicación, de los vicios, de los excesos de alcohol de fin de semana, de la ambición desmedida y aquí, en el mejor de los casos, encuentran refugio, cuidado y tratamiento para sus enfermedades. ¡Pero salen de aquí contagiados! Contagiados de hipocresía, de fariseísmo, de complejo de superioridad (que en realidad es un complejo de inferioridad que busca compensarse), de sed por demostrar quién es el más santo, el más espiritual, el más consagrado, el más reformado, el más teológico. La infección intrahospitalaria puede pasar en cualquier hospital, pero pasa más (mucho más) en los hospitales insalubres que no hacen uso de los básicos procedimientos de asepsia. El Evangelio nos llama a arrepentirnos de las malas obras que surgen de corazones rebeldes y contrarios a la ley de Dios y también nos llama a arrepentirnos de las buenas obras que surgen de corazones deseosos de manipular a las personas y al mismo Dios. Podemos oponernos a Dios de la misma manera, a través de ir contra las reglas o a través de seguir las reglas. Podemos estar lejos de Cristo y su señorío, queriendo ser nuestros propios señores que deciden lo que es bueno y malo desde y para sí mismos y podemos estar lejos de Cristo y su salvación, queriendo salvarnos a nosotros mismos haciendo el mejor esfuerzo por ser buenos y santos con el fin de que Dios nos bendiga, que Dios nos prospere, que Dios bendiga a nuestra familia y que Dios nos dé el cielo. El Evangelio confronta a ambos tipos por igual. El Evangelio afirma, proclama y recuerda cada semana, cada día, que sólo Cristo es el único y suficiente Señor y Salvador.

¿Estamos preocupados, más allá de la obediencia religiosa a los manuales de igle-crecimiento, de ser iglesias evangelio-céntricas? ¿Es la mala noticia [de la profundidad y extensión de nuestro pecado] junto con la buena noticia [del pago TOTAL que Cristo hizo por gracia en la cruz y en la tumba vacía por nuestro pecado] lo que más hablamos en nuestras iglesias?

Que nuestras iglesias estén llenas de no-cristianos es mi anhelo. Pero de no-cristianos que saben bien que no lo son y que, aún así, se sienten amados por la comunidad mientras exploran la fe y aprenden de Jesús. Pero a veces nuestras iglesias están llenas de no-cristianos que no tienen idea que no lo son y ¡no sólo eso! Sino que el resto de la iglesia los admira y los elige para cargos porque son tan buenos, correctos y morales... ¡pero la verdad es que están perdidos! Y ellos mismos no lo saben porque creen que confesar la doctrina correcta, dar el diezmo, llegar a la hora a la Escuela Dominical, ser buenos trabajadores y padres de familia responsables es sinónimo de "ser un buen cristiano".

El Evangelio bien predicado y bien enseñado es un agente antiséptico efectivo. En este mundo caído no tendremos iglesias perfectas y lo sabemos bien, pero tampoco debemos conformarnos a convivir con el pecado de la falta de santidad o con el pecado de la auto-justicia. Sólo el Evangelio es el antídoto. Sólo el Evangelio de gracia nos justifica.... Y SÓLO EL EVANGELIO DE GRACIA NOS SANTIFICA.

martes, 6 de julio de 2010

Link Video del Retiro

El video lo dice todo, basta hacer clic aquí

Si se fijan tenemos cuenta de vimeo.... nada mal, ¿no?

En Cristo,

Jonathan.

miércoles, 30 de junio de 2010

RETIRO JUNIO 2010: ABRAZANDO A CRISTO EN EL PROCESO DE LA MISIÓN







Entusiasmo, expectativa y disposición se leía en la actitud de cada uno de los integrantes de UNO el sábado en la mañana al llegar a la Granja Presbiteriana en El Tabo. Allí, de la mano de Nuestro Dios y el estudio guiado por el Rev. Jonathan Muñoz, pastor de UNO, todos aprehendimos más acerca de nosotros mismos, reflexionando sobre los ídolos actuales y la forma en que éstos se relacionan con nuestras vidas; descubriendo los dones que cada uno tiene para poner al servicio de Dios en esta comunidad de fe; y entendiendo cómo la centralidad del Evangelio se evidencia en el desarrollo de toda nuestra vida.

Y de la reflexión personal, pasamos a la comunitaria, pues no podíamos dejar de entender cómo es que las personas, que aún no conocen el Evangelio, entienden el mundo y el papel que desempeñan en éste, por eso realizamos un estudio sobre las distintas cosmovisiones que marcan sus vidas, el cual nos permitió ver cómo sus propósitos e interrogantes encuentran respuestas concluyentes en el Cristianismo.

También, nos emocionamos con el testimonio de Jorge y Andrés, integrantes de UNO. A través de sus relatos fuimos testigos de cómo el Señor convierte situaciones muy difíciles o triviales, que aparentemente nada tienen que ver con Él, en la forma para llamar a sus hijos; y confiados en el poder de Nuestro Dios, nos entusiasmamos con la idea de que estos testimonios se multipliquen en UNO.

Así, el lunes no sólo nos regresábamos cantando a viva voz la melodía con que Claudia nos enseñó a leer música, sino también con el anhelo en nuestro corazón de ser un cuerpo que glorifica al Señor en el culto, en nuestro ministerio y por supuesto en el desarrollo de las vidas de cada uno de sus miembros, porque hemos entendido que no hay mejor metodología para hablar de Cristo que nosotros mismos ni mejor manera de vivir que siguiendo el principio presente en proverbios, “sobre toda cosa guardada guarda tu corazón porque de el mana la vida” (Proverbios 4:23), el cual nos insta a cambiar cada mañana el modo por defecto en el que funcionamos para ponerlo en sintonía con Nuestro Buen Padre Celestial y Su perfecta Voluntad.

miércoles, 26 de mayo de 2010

¿Qué tipo de iglesia es UNO?


Estimados amigos, Tim Chester, un tipo reformado, pastor de una de las iglesias que más crece en Inglaterra llamada The Crowded House y autor de un libro que está revolucionando el ministerio de muchas iglesias, llamado Total Church, dijo en cierta ocasión algo que me impactó y me dejó, simplemente, sin palabras y con una llama en mi corazón ("que así sea UNO" clamé en mi interior). Aquí les comparto sus breves, pero impactantes palabras:


"Para muchos cristianos, la iglesia es un evento. Una reunión a la que asistes o un lugar en el que entras. Las iglesias puede que hablen de ser una familia, pero la mayoría de sus recursos van a parar al evento que tiene lugar el domingo. Adquirir un edificio. Preparar el sermón. Producir el boletín. Poner a punto el local con luz y sonido. Planificar el “show”. Los ensayos del grupo de alabanza. Es allí donde invertimos el dinero de la iglesia y el tiempo de las personas implicadas. Hablamos de ser familia y comunidad, pero cuando miras el uso que hacemos de nuestro tiempo y nuestro dinero, resulta evidente que vemos la iglesia como un evento.

A menudo la gente me pregunta sobre nuestras reuniones. ‘¿Cuando os reunís? ¿Dónde? ¿Qué hacéis cuando os reunís? Pero si haces este tipo de preguntas, no has acabado de entender nada. No estamos promoviendo una nueva manera de hacer reuniones. De hecho, nuestras reuniones no son las mejores reuniones. La música no es muy buena y la enseñanza nada fuera de lo normal. Lo importante es compartir nuestras vidas: viviendo con la intención de que el evangelio afecte lo cotidiano de nuestras vidas.

La iglesia nunca superará el show que nos ofrece la TV y los vídeos musicales. Pero no hay nada que se pueda igualar a la vida en comunidad de la iglesia. En ningún otro lugar encuentras junta gente tan diversa. En ningún otro lugar la gente que esta rota encuentra un hogar. No existe ningún otro sitio donde se experimente la gracia. No existe ningún otro lugar donde Dios esté presente por medio de su Espíritu."


¡Que la visión encienda los corazones de todos!


La historia que debemos contar en UNO


Creación, Caída y Redención son los tres elementos que constituyen la esencia del relato bíblico. Este relato es una historia maravillosa que nos habla de un Dios que amó y ama Su creación. Es la historia de un Dios que ha tomado la iniciativa de dar vida, gozo y deleite a los hombres y mujeres, que decidió revelarse a ellos, que les dio un jardín para cuidar y una misión que cumplir a través de la diversidad de vocaciones. Es la historia de la iniciativa divina de ir a buscar a una humanidad ingrata, desobediente, necia y auto-destructiva. Es la historia de Dios interrumpiendo constantemente el camino de traidores en fuga con el fin de revelarles una promesa, de relacionarse, de establecer con ellos pacto y de caminar a su lado. Es la historia de Dios dando segundas, terceras, cuartas y enésimas oportunidades a un pueblo rebelde y duro. Es la historia de un Dios que nos da salvación gratuita en el más horrendo y cruel sacrificio de la historia: el de Su propio Hijo. Es la historia de la justicia de Dios que se revela para salvación, al declarar justos y sin mancha a impíos y pecadores. Es la historia del poder de Dios que resucitó a su Hijo al tercer día, que venció la muerte y que dio, en el Espíritu Santo, ese mismo poder a sus hijos adoptados con el fin de que destruyan día tras día el poder del pecado en sus propias vidas, en sus comunidades, en sus barrios, en sus ciudades y en este mundo que agoniza. Es la historia de un nuevo mundo, restaurado, sanado, re-creado que se goza y se deleita eternamente bajo el gobierno justo y amoroso del Rey de reyes y Señor de señores. Es la historia de un Dios que está allí y que no está callado… en fin: ¡es la historia de Dios!

Dios nos invita a ser parte de esta historia, comenzando hoy mismo: arrepintámonos de los ídolos de una cosmovisión antropocéntrica, renovemos nuestra mente (Rom 12.1-3) conforme a Su Palabra, sometamos todo pensamiento a la obediencia a Cristo (2ª Co 10.3-5) y no temamos aplicar, llevando valientemente a la práctica diaria de nuestros estudios, nuestros valores, nuestros oficios, nuestros trabajos y nuestros campos de especialización la consistencia de una Cosmovisión Bíblica, genuinamente fundamentada en la Escritura, fruto de un corazón lleno de adoración y pasión por Dios y proactiva en la transformación integral de este mundo para la gloria del Padre en Cristo por el poder del Espíritu.

miércoles, 19 de mayo de 2010

UNO: Creciendo en amor, comunión y conocimiento de la Palabra de Dios



















Avanza el año y junto con éste nuestro estudio y preparación para lo que será nuestro trabajo misionero en el centro de Santiago. Ya finalizamos nuestro estudio del Dios pródigo, libro de Timothy Keller, que hace una lectura profunda de la Parábola del Hijo Pródigo, rescatando la figura y el significado de la historia del hijo mayor en el desarrollo de esta narración, cuyo carácter y perfil nos resultaron mucho más familiares y pudimos entender que constituía una persona perdida al igual que el hijo menor, cuya perdición era mucho más evidente. Esto, sin duda, nos ayudó a entender la importancia de Dios en nuestra vida sólo por ser Dios más allá de lo que Él hizo, ha hecho y hará por cada uno de nosotros, comprender que la definición cristiana de nuestra vida y el desarrollo de nuestra misión, siguiendo el imperativo que aparece en Mateo 28: 18-20, es un acto de adoración al Señor, para darle gloria a Él y no ya para tratar de retribuir en “algo” su amor por nosotros o porque forma parte de nuestras obligaciones cristianas. Entendemos el servicio al Señor como la consecuencia de nuestro amor por Dios y no como un medio que nos llevará a recibir bendiciones de parte de Nuestro Señor.

De esta manera, pusimos en crisis nuestros conceptos de Pecado, Perdición para reconocer a Cristo como el verdadero hermano mayor, que ama verdaderamente al Padre, por lo tanto se preocupa de hacer su voluntad, de cumplir sus anhelos. Él viene en busca de cada uno de nosotros, nos viene a rescatar, nos justifica y nos lleva de regreso a la casa de Nuestro Padre Celestial.

También, hemos comenzado a estudiar el libro “Vayan y hagan Discípulos” de Roger S. Greenway, donde poco a poco nos hemos ido empapando de una mirada más práctica del desarrollo de las misiones, ello por supuesto con un respaldo bíblico sustentable que el autor comparte en cada punto que habla del cotidiano de la Misión. Hasta ahora hemos reflexionado sobre lo que es el campo misionero hoy, la trascendencia e importancia del desarrollo de las misiones en el mundo, y por supuesto el rol preponderante si no único del Espíritu Santo en la promoción, desarrollo, dirección y resultado de la proclamación del Evangelio.

Pero, no sólo hemos ido creciendo en el conocimiento y reflexión de la Palabra del Señor, pues el amor y la comunión que día a día cultivamos con Nuestro Dios, paulatina e inexorablemente se va reflejando entre nosotros, que siendo un grupo de hermanos en la fe, también somos un grupo de amigos, que vive la adoración a Nuestro Dios libremente. Cuestión, que quedó de manifiesto el sábado recién pasado en la sala de eventos, que se ubica en el piso 26 de un edificio central en Teatinos, donde viven Claudia y Jorge, allí a la usanza de la Iglesia del primer siglo, compartimos la comida, que en nuestro caso fueron unos ricos tacos, hicimos un devocional a Nuestro Dios y compartimos la Cena del Señor. Así, se desdibuja en nuestro andar la división que hemos hecho de nuestra vida. “Sagrado y secular se fundieron”, manifiesta regocijado el Rev. Jonathan Muñoz, Pastor de Uno. Una frase, que pensando pragmáticamente nuestro proyecto se vuelve clave, pues entendemos que peinados estrafalarios, ropas que escapan a nuestro concepto de normalidad y/o vidas que no obedecen nuestros patrones morales, no son impedimentos para acercarnos a contar las buenas nuevas, Cristo mismo vino en busca de pecadores y se relacionó con ellos, de la misma forma, nosotros entendemos que el papel de la iglesia no se remite sólo al contexto de lo “sagrado”, sino que lo trasciende ampliamente. Oremos para que el Señor nos fortalezca, ayude y dirija este anhelo misionero que el Espíritu Santo ha puesto en el corazón de cada uno de los cristianos y cristianas que conformamos UNO.

martes, 18 de mayo de 2010

EL CENTRO



Aquí les comparto el pensamiento de un gran teólogo actual, Donald A. Carson.

Que nos haga pensar y tomar decisiones radicales POR el Evangelio:

Si la iglesia está siendo edificada con grandes porciones de encanto, personalidad, oratoria pegajosa, pensamiento positivo, habilidades empresariales, experiencias emocionales poderosas y astucia personal, pero sin la proclamación continua, apasionada y llena del Espíritu de “Cristo y este crucificado”, podemos estar ganando más adherentes que convertidos… no pienses que puedes adoptar las filosofías y valores de este mundo como si tales opciones no tuvieran un impacto profundamente perjudicial en la iglesia. No pienses que puedes escapar de eso. No te engañes pensando que estás en onda, que eres un cristiano de vanguardia, cuando en realidad estás abandonando el Evangelio y causando daño a la iglesia de Dios. (D. A. Carson, The cross and Christian Ministry, p. 80, 84)

Recuerden amigos: sin Evangelio no hay misión, sólo quedaría una "iglesia" transformada en un club social que se confunde con su entorno y que ya no es sal. El centro de UNO es Cristo y no nos proponemos otra cosa que proclamar el Evangelio, o sea a Cristo crucificado. ¡Este es el poder de Dios! Y el poder de Dios no necesita ayuda de parafernalias religiosas, cools o hips.

Esto sólo será realidad en UNO, si primero lo es en los corazones de quienes formamos parte de UNO: ¡QUE CRISTO, EL EVANGELIO, SU CRUZ Y SU TUMBA VACÍA, SEAN EL CENTRO DE NUESTRO ANDAR DIARIO!

miércoles, 14 de abril de 2010

QUEREMOS SERVIRTE POR PURO AMOR Y ADORACIÓN A TI, SEÑOR

En UNO continuamos preparándonos para salir al campo misionero y también reconociéndolo, pues a contar de este mes, no sólo nos reuniremos en el departamento de Jonathan y Priscilla, sino también en la casa de los diferentes miembros del equipo UNO, lo haremos una vez al mes y este lunes fue el turno de Ivonne, quien nos abrió las puertas de su hogar para seguir adorando a Nuestro Dios y deleitándonos en el conocimiento de su Palabra.

Con el correr de los días, a medida que hemos ido profundizando y avanzando en la lectura del libro de Keller “El Dios Pródigo” hemos ido pensando y reflexionando sobre quienes somos como cristianos, pues al revisar la parábola de los dos hijos en Lucas 15 hemos redefinido nuestro concepto de pecado y de perdición, entendiendo que el Evangelio, no es sólo la puerta de entrada a una vida de comunión con el Señor, sino que es el centro de nuestra vida con Él.

Esto, nos ha llevado a pensar sobre nuestro modo de vivir el evangelio y por supuesto de transmitirlo, Dios nos ha confrontado con nosotros mismos y sin duda esto ha sido de mucha bendición para cada uno de nosotros, cuestión que se evidencia en las experiencias que lunes tras lunes hemos ido compartiendo, las que no sólo hablan de parte de nuestra historia de vida, sino que también de la reflexión que hacemos a propósito de las mismas, dándole muchas veces una significación distinta a propósito de este estudio guiado por el Rev. Jonathan Muñoz.

Y no sólo la perspectiva más amplia con la que miramos el pecado y la perdición nos ha maravillado, sino también entender e identificar a Cristo con la figura del hermano mayor competente, que se preocupa de los intereses de su Padre y cuya felicidad radica en la felicidad del Padre. Sin duda, este es nuestro anhelo, queremos que nuestra felicidad, que nuestra paz, que nuestro servicio, que nuestra alegría radique y dependa de Ti, Señor.

Queremos servirle a Nuestro Padre, no para ser identificados como siervos fieles que trabajan eficientemente, pues corremos el riesgo de hacerlo para intentar recompensar a Nuestro Señor por lo que ha hecho por cada uno de nosotros y hoy sabemos que eso conlleva un servilismo inútil, pues Tú no lo necesitas, queremos servirte por puro amor y adoración a Ti. TE AMAMOS SEÑOR Y QUEREMOS SER SIERVOS TUYOS PARA ADORARTE, BENDECIR TU NOMBRE Y DARTE LA GLORIA A TI Y QUEREMOS QUE ESO DEPENDA ENTERAMENTE DE TI.

martes, 23 de marzo de 2010

ADORACIÓN, ORACIÓN, COMPAÑERISMO Y EVANGELIO













La reunión de este 22 de marzo, sin duda tuvo un sabor especial, y no fue precisamente por los bebestibles y las cosas ricas para comer que compartimos, sino por una cuestión mucho más profunda. Este lunes al mirarnos, no sólo veíamos un buen hermano, una esposa, un posible buen amigo, una hermana amada, sino que podíamos reconocernos como compañeros de la tarea misionera que hemos soñado y anhelado como equipo. Nos hacemos cargo en conjunto del mandato bíblico y tomados de las manos vamos caminando hacia el desierto, “tal como Felipe lo hizo, él no sabía con lo que se iba a encontrar, sin embargo obedeció”, nos exhorta Cesar Pino, seminarista y miembro del equipo UNO, en la reflexión bíblica de Hechos 8:26-40, que secundó al momento de alabanza, con el que iniciamos la reunión.

Luego, guiados por el Rev. Jonathan Muñoz, plantador de UNO, analizamos juntos el primer capítulo del libro “Dios Pródigo” de Timothy Keller. Compartiendo diferentes miradas y apreciaciones sobre nuestra forma de vivir el cristianismo, aceptando defectos, planteando interrogantes, especulando posibles respuestas, y manifestando nuestra sorpresa frente a algunos planteamientos del autor, fuimos construyendo nuestra perspectiva de lo que significa ser un hermano mayor, hermano menor y por supuesto entendiendo más del ser de Dios, reflejado en este padre amoroso de “la parábola de los dos hijos” como el autor certeramente prefiere llamar a la parábola, que desde hace mucho tiempo conocemos como “la parábola del hijo pródigo”. LA PRÓXIMA SEMANA ESPERAMOS PROFUNDIZAR MÁS NUESTRO APRENDIZAJE AL ANALIZAR LOS CAPÍTULOS DOS Y TRES. También, Laura, Daniela y Andres oraron al Señor por las personas que Dios a través de UNO ya ha decidido alcanzar, pidiéndole, sabiduría, desplante, y mucho amor para acogerlos y hablarles acerca de Él, su palabra y su inmenso amor.

Más tarde, nos alegramos de recibir a Pamela Navarro, que si bien nos visitaba por primera vez ya estaba decidida a ser parte de nuestro equipo, y también a Andres Guzmán, quien tras conocer el proyecto en nuestra reunión anterior no quiso perderse la oportunidad de sumarse a este anhelo de hacer nuestra visión [que en el Santiago urbano emerjan congregaciones que, por el poder de la gracia de Dios en el Evangelio, viven una restauración integral de sus corazones en adoración al Padre, vidas comunitarias de amor en Cristo y cumpliendo su llamado en la plenitud del Espíritu Santo] una realidad en medio de nuestra ciudad.

Para finalizar nuestra reunión, nos tomamos de las manos formando un círculo, inclinamos nuestras cabezas y oramos a Nuestro Dios para agradecerle solamente, para decirle lo felices y gozosos que nos hace sentir que Él forme parte de nuestra vida, por entregar a su hijo para que muriera por nosotros miserables pecadores que no lo merecíamos en absoluto; decirle GRACIAS PORQUE TÚ ESTÁS CON NOSOTROS Y NO NECESITAMOS NADA MÁS.

miércoles, 17 de marzo de 2010

UNO DA EL VAMOS A LAS ACTIVIDADES 2010



Este lunes 15 de Marzo, todo el equipo UNO llegó hasta la reunión de inicio de actividades 2010. Nos dejamos de ver en enero y el reencuentro era algo esperado, todos teníamos una historia que compartir, obviamente relacionada con nuestra terremotiada experiencia, y también reflexiones que exponer a propósito de este mismo hecho.


De a uno, de a dos, en familia y/o en grupo fuimos llegando hasta el café SNS, cuyo nombre por cierto no hace alusión ni al servicio de salud del país, tampoco al sistema nervioso simpático, sino a una cuestión mucho más “cool”, que se relaciona con nuestra web 2.0: Social Network Service. Su ubicación en plena alameda compensa lo inusual de su nombre, así todos llegamos sin ningún problema hasta nuestra reunión.

Una vez instalados en el lugar y después de los saludos, abrazos, bienvenidas, y algunos pedidos para saciar nuestro apetito de la tarde, quisimos partir nuestra reunión agradeciendo al Señor por nuestras vidas y por la posibilidad de servirle. Cada uno en su puesto oró al Señor y después nuestro Hno. César Pino, seminarista y miembro del equipo de UNO, dirigió una hermosa oración en voz alta a Nuestro Dios.

Luego, fue momento para compartir nuestra forma de vivir el terremoto, donde inevitablemente todos coincidimos en la inmensa misericordia que Dios manifestó en este momento, que algunos atravesamos con mayor o menor fortuna que otros. Jonathan Morales, quien es parte de UNO, fue quizás uno de los que más estuvo en peligro, pues él se encontraba en Iloca, lugar que no sólo fue afectado por el terremoto, sino también por el tsunami. También, fuimos capaces de abrir nuestro corazón para contar nuestras reflexiones, lecciones aprendidas, y nuestros cambios de actitud a propósito del terremoto. Frases como “no creo que esto haya sido una muestra del juicio de Dios”; “yo jamás temí por mi vida, hace rato que yo no tengo miedo de eso, pues sabemos de quien venimos a quien vamos”; “después de esto, volví acercarme a mi madre”; “yo espero que las personas no continúen creyendo que nuestra fragilidad, que quedó aquí en evidencia, puede ser resguardada y asegurada por algo material”; se hicieron escuchar en el lugar.

Y del diálogo pasamos a la exposición del Rev. Jonathan Muñoz, Pastor Plantador de UNO, quien fue el encargado de presentarnos el plan de trabajo 2010 sistematizado. Visión, Misión, Objetivos, Formas de Trabajo, Equipos, Fechas, y Etapas del Proyecto, fueron revisadas, esta vez, en conjunto y aprobadas por todos. Y como buenos presbiterianos comenzaremos estudiando, nuestro primer libro será “el Dios Pródigo” de Timothy Keller, que de seguro nos permitirá profundizar nuestra teología y propiciará en nosotros una mayor preparación para hablarles a las personas de Nuestro Amado Señor. Oremos juntos porque el Señor nos bendiga como grupo y nos inste cada día a vivir por aquellas personas que aún no le conocen, pero que Dios mediante, lo harán por el trabajo que UNO está comenzando en esta ciudad.

martes, 19 de enero de 2010

Entendiendo lo central de nuestra fe

Lunes tras lunes vamos conociendo, aprendiendo y preparándonos más para hacer de nuestra visión de comunidad “un corazón en el padre, un pueblo en Cristo y una misión en el espíritu”, una realidad en medio de nuestra ciudad. Y para esto, hemos entendido que tenemos que hacernos preguntas sobre cuestiones básicas de nuestra fe, como el Evangelio y nuestro concepto de pecado, que son más que la puerta de entrada a una vida en Cristo, pues acompañarán permanentemente nuestro caminar en la fe y el quehacer del ministerio que decidamos desarrollar en nuestras iglesias.

Estos conceptos que han sido catalogados como “…algo esencial en nuestra vida cristiana”, en una interesante ponencia de la Parábola del Hijo Pródigo, realizada por el Pastor plantador de UNO, Jonathan Muñoz, han estado en el centro de nuestra reflexión durante estas semanas. “…el pecado no es sólo acciones inmorales, es mucho más que eso. Cuando actuamos pensando en lo bien que lo estamos haciendo a los ojos de Dios, y en las posibles bendiciones que eso nos puede traer, no estamos actuando por amor a nuestro padre, al contrario, lo estamos despreciamos por aquello que Él nos puede dar y ¿Saben que hay detrás de esto? Un falso Evangelio” concluyó el reverendo.

También, nos hemos ocupado de mirar nuestro alrededor y hemos identificado, a propósito de una publicación de circulación nacional, grupos urbanos que llegan a formar una subcultura al interior de la cultura que compartimos como país. Sujetos que tienen en común intereses intelectuales, formas de vestir, formas de pensar y ver el mundo, códigos lingüísticos, ideas y proyectos. Personas que piensan que tienen una mejor manera de afrontar el mundo y vivir la vida.

En un primer acercamiento hacia estos grupos, descubrimos a Ecologistas, estudiantes revolucionarios y los artistas del mundo audiovisual, y decidimos abrirnos al diálogo, dejar atrás nuestros prejuicios respecto a su postura y con un corazón abierto, audaz y lleno del amor de Dios y el conocimiento de su palabra, comprender sus demandas y el sentido de su mundo, y entendimos que con cada uno, podíamos establecer puentes de acercamiento hacia el Evangelio.